Es urgente retornar a la gestión rural, pero integral, empresarial y sistémica (I)

Por Rosa Lía Medina de López

“Los cambios acontecidos en el mundo y en nuestro país, son producto de los inventos de la “revolución industrial” con aplicación en todas las artes e industrias imaginables, y ahora el planeta permanece envuelto en dos dinámicas muy fuertes: una que ha generado bienestar para los países industrializados, ampliando sus límites y aún los del planeta, y otra que genera problemas de talla mundial, que hace temer por la supervivencia de la humanidad.. Necesitamos acudir a formas no destructivas o sea “tecnologías post-industriales que abran inmensas oportunidades empresariales rurales para Colombia con las alternativas a plantear, que son la ampliación de las fronteras de producción, procesamiento y comercialización, indispensables si queremos mantener la viabilidad de una Colombia unitaria e integrada”. “Gestión Empresarial Rural”, Eduardo Noriega A.- Instituto Universitario Juan de Castellanos. Enero 2000

“Estamos todos perfectamente preparados para un mundo que ya no existe”, es la sentencia en el prefacio de una de las más didácticas obras que conozco sobre el tema, desarrollado para un programa de maestría en la U. Juan de Castellanos de Tunja, tan vigente a pesar de su publicación de hace ya 20 años, con la estructuración y dirección de un verdadero maestro e indiscutible consultor e investigador científico en diferentes áreas de las ciencias exactas y sociales para el desarrollo integral rural y urbano, en aspectos económicos, sociales y políticos, Eduardo Noriega Alvarado, a quien estaba debiendo sin saberlo, la expresión de mi gratitud por la amable e inmerecida nota de reconocimiento, que a pesar de haber consultado el libro muchas veces, recién la encontré muy adherida en el doblez interior de la portada del ejemplar, voluminoso texto de 471 páginas, recibido para entonces como conclusión del inmenso empeño de investigación multidisciplinaria que emprendimos en el sector agropecuario colombiano, con un grupo de profesionales muy idóneo y muy comprometido, nota que me exigirá por siempre“continuar inspirando y llenando de fortaleza su misión”, pero también la de todos los que recibimos los grandes aportes de su sabiduría para un inmenso propósito en nuestra querida Colombia rural.

Con fines estrictamente académicos de extensión investigativa y para mayor comprensión de lo expuesto en las conferencias de 5 y 6 de Junio/2021 próximo pasado, en el Aula máxima virtual de la Fundación Excelencia, Liderazgo y Transformación -“Fundelt”, sobre “Una posible verdadera Reforma Rural Integral” y “La Biotecnología Agrocolombiana”, queremos presentar por este medio, antecedentes motivacionales que además comprendan un modelo para un sistema de gestión de polos de desarrollo estratégicos, que se puede constituir en fundamento básico para la formación de ciudadanos con mentalidad de estadistas y visión de estrategas entre los ciudadanos miembros activos y de las reservas militar, policial y civiles adherentes, así como uno de sus proyectos de desarrollo fundamentales para la constitución de un partido político estructurado y organizado dentro de la normatividad vigente, que sea su verdadero mediador ante los entes estatales de todo nivel.

En la actualidad la población mundial se estima en 7.8 billones de personas según el sistema numérico inglés, o 7.800.000.000 siete mil ochocientos millones según el sistema decimal, y el total para América latina y el Caribe en 630 millones.

Se estima que la población mundial alcance los 8.500 millones en el 2030, 9.700 millones en el 2050 y 11.200 millones en el 2100; aunque como en todas las proyecciones existe margen de error, también se prevé que mejorarán las posibilidades de supervivencia en todos los países y por tanto el crecimiento poblacional superará el indicativo del 13% en cada periodo mencionado; entonces la necesidad de producción de alimentos en las mejores condiciones deseables, es y será enorme, permanente y evidentemente creciente, así como el manejo integral para el reciclaje y disposición final de residuos sólidos y líquidos rurales y urbanos, con procesos orgánicos altamente tecnificados que generen total beneficio para suelos, cultivos, alimentos y medio ambiente en general

Los recursos naturales y del medio ambiente ya no existen en todas partes con la abundancia que se conocieron en el pasado, y quienes aún disponen de ellos, deben basar su desarrollo rural integral a través de prácticas de producción agropecuaria no destructivas ni contaminantes y certificables procesamientos con eficientes resultados que garanticen no sólo un destacado y saludable valor agregado a sus materias primas para su comercialización global, sino también la reparación sistemática del medio ambiente y de la economía nacional conducida a un modelo eminentemente asociativo-productivo, que sustituya el actual modelo especulativo causante de tantos desastres económicos a todo nivel.

Una inmensa cantidad de áreas en el planeta se han desertizado y además muchas otras han sufrido serias degradaciones biológicas y daños por varias causas, entre ellas la de los monocultivos y la agricultura química, especialmente en la zona tropical.

La Biotecnología Agrocolombiana está en capacidad de reparar múltiples daños a los suelos de cualquier región y actuar como eficiente sustituto orgánico para fertilización y tratamiento de múltiples problemas fitosanitarios eliminando en altísima proporción el uso de agroquímicos .

En Colombia además y a pesar de la inmensa cantidad de nuestros recursos naturales, gran parte de la población es críticamente pobre, lo que ha generado una exacerbada violencia a causa de la injusta distribución de ingresos, desde hace ya varias décadas incrementada por el narcotráfico y por acción de la delincuencia organizada en diferentes actividades ilícitas, además de su aprovechamiento por las agrupaciones comunistas nacionales e internacionales empeñadas en apoderarse del país por sus excepcionales ventajas geopolíticas.

Por tanto cualquier alternativa de reforma rural que no considere esa grave disfunción social representada en la inequidad, la corrupción administrativa, legislativa y judicial, la inseguridad absoluta, todo incrementado por una casi total y descarada impunidad, estará condenada al fracaso si no se estructura de una manera verdaderamente integral, empresarial y sistémica, con fines asociativos específicos de beneficio para los productores y para el despegue socio-económico nacional a través de una comercialización global.

[Continuará (II) “Política Empresarial Rural” – (III ) “La estructura global rural y sus implicaciones”)