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Don egocéntrico, don propositivo y don comprometido hablan de cultura política

Crónica

Equipo de Educación política Fundelt

Esta es una conversación informal ocurrida en la capital de la república. Don Propositivo y Don Egocéntrico debatían asuntos acerca de la necesaria cultura política, para estructurar un partido político encabezados por veteranos de las cuatro fuerzas, al tiempo que don Comprometido escuchaba paciente la acalorada discusión, pero al final opinó y puntualizó… Tema para reflexionar y para actuar en consecuencia:

Don propositivo:  Parece que las convenciones nacionales e internacionales de las reservas, aplacaron deseos de muchos integrantes de la reserva militar y policial, para lanzarse al ruedo político. Tal vez, no se han dado cuenta que esa tarea exige mucha formación integral de cultura política, para no cometer los errores del pasado y evitar que vengan politiqueros de partidos ya formados a llevarse nuestro caudal electoral. Requerimos esfuerzo integrador, por medio de la cultura política que estructure en la fortaleza organizativa interna, la ideología la identidad de fundamentos, los valores y la claridad de conceptos. Que hablemos el mismo idioma y tengamos los mismos objetivos.

Don egocéntrico: No, no, no señor, no venga aquí con esas cosas. Los veteranos y las reservas necesitamos un líder, un caudillo, un guerrero que nos represente. Alguien que no hable de la filosofía que usted plantea. Busquemos a ese señor y ese nos saca adelante.

Don propositivo:  O sea que, ¿según su punto de vista, lo que debemos es hacer todo a la “guachapanda”, sin organizarnos y sin tener identidad organizativa, ni organización, ni ideología, ni ninguna cultura política?

Don egocéntrico:  Se lo dije desde hace seis meses, cuando conversamos en una cafetería en el Centro Internacional. O ya se olvidó que yo soy experto en política, porque soy el presidente nacional de las reservas de la vereda El Ultimo Suspiro del corregimiento de Morropelado, que tengo 25000 votos amarrados, que yo hablo cuatro idiomas, yo soy especializado en ciencias ocultas en las universidades de Saturno y Mercurio… mejor dicho yo, yo, yo, yo… El país entero, tiene que seguir mi propuesta que es la mejor, porque yo soy el líder que ustedes necesitan, pues yo voy para el congreso y yo les abro el camino… y todos deben votar por … Si no hacen, es porque no somos unidos y porque los envidiosos no quieren que yo sea el que los representa en la política… Mejor dicho, si no soy yo no puede ser nadie más y mis 25000 voticos siguen amarrados.

Don propositivo: Señor, su afirmación es una soberana mentira. Nadie tiene votos amarrados, ni asegurados, ni siquiera el de cada uno de nosotros, pues el mismo día de las votaciones puede suceder algún contratiempo que no permite votar. Bájese de esa nube y ponga los pies en la tierra, que como dice un conocido dirigente político colombiano: los votos se consiguen uno por uno, no hablando “paja

Don egocéntrico: Es que usted como muchos de la reserva me tienen envidia. Yo ya tengo experiencia política porque ya participé en elecciones. No hay otro que pueda hacerlo mejor que yo. Por eso dedíquense ustedes a hacer trabajo social, a organizar la gente, a trabajar en esas babosadas que ustedes llaman cultura política, y cuando estén listos me llaman, para yo prestarles mi nombre y gobernarlos a ustedes. No me interesa ese cuento de cultura política.

Don propositivo: Me queda claro, que usted está pensando en sus intereses personales, para llegar al congreso de la república o a la presidencia del país, utilizando a los demás, de la misma manera que hacen los politiqueros corruptos. Y por eso no se da cuenta, que todos los colombianos queremos acceso a la democracia participativa, no a vividores, puesto que en esa figura radican todos nuestros males. Y eso se soluciona haciendo cultura político de partido serio, organizado y con un plan coherente.

Don egocéntrico: Oiga mijo, le repito otra vez porque parece que usted no me ha entendido: Yo, yo, yo, yo solo yo, voy a organizar mi propio partido. No me importa lo que piensen quienes me critiquen o los que como usted vengan a hablar de cultura política. Yo soy el mejor y mi imagen es para que la sigan todos no para que me digan que tengo que hacer programas, ni planes, ni mucho menos, que me digan que pierda tiempo construyendo culturas que no me interesan.

Don propositivo: ¿Pero, de donde acá usted es el candidato único de las reservas?.. ¿Desde cuándo lo escogimos como tal, los demás veteranos militares y policías de la reserva? ¿Dónde queda la aceptación de la participación democrática de todos los colombianos, para escoger a quienes nos representan? ¿Cuál es su proyecto programático y organizativo a favor del país no de su bolsillo?

Don egocéntrico:  Vea compañerito, no se complique con su cuento de la cultura política y de los proyectos académicos, o de la honestidad. La política es para hacer billete. Mejor vaya hable con mis asesores, ayúdeme a conseguir votos con las reservas y sus familias. Yo consigo el aval con cualquier partido, no importa cual, entre todos hacemos campaña para que voten por mí, y ya sabe que ahí le “damos una esquirla para los dulces”.

Don propositivo: No, no, no. La corrupción no es la solución… Contra los corruptos es que debemos luchar todos.  No cuente conmigo, ni con ningún apoyo para hacer acuerdos o pactos en la sombra

La conversación se tornaba agitada y las voces subían de tono, De repente, don comprometido intercedió en la conversación y presentó sus puntos de vista:

Escuchando las arrogantes y poco honestas ideas de don egocéntrico, negando la necesidad de construir cultura de partido político, les repito que si queremos llegar algo serio para participar en política, debemos unirnos a la Fundación Excelencia, Liderazgo y Transformación (ELT), institución nos está formando mediante videoconferencias diarias y constantes comunicados, mensajes precisos en las redes y por medio del periódico Ideas , para que de manera democrática, entre todos construyamos un partido político fuerte, que nos represente en estas elecciones venideras, pero que se prolongue en el tiempo como una institución democrática sólida y duradera.

Trabajemos en equipo con ELT. Unamos esfuerzos a lo que ya existe y está organizado, no a ideas etéreas, ni a quienes solo piensan en ellos con la falacia de que buscan nuestra unión, pero están enfermos de vanidad y se oponen a lo que nos es su egolatría. Cambie o se esfuma como los dinosuarios, don egocéntrico. Analice y verá que esa es la única opción que tiene.

Nota de la redacción: Con base en lo planteado por los tres interlocutores de esta crónica. A quien creer más: ¿A don propositivo? ¿A don egocéntrico? O ¿a don comprometido?

Moraleja: …. Lo que no se estructura con base en una cultura organizacional, nunca funciona. Si la política es lo más importante para una sociedad y queremos participar en ella, debemos escoger a los más capaces, no a los más habladores ni a los egocéntricos. 

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