¿Improvisación, o el cálculo de lo proyectado?
Por Diego León Caicedo Muñoz
“Cuando se agotan los recursos, los impuestos se recaudan bajo presión. Cuando el poder y los recursos se han agotado, se arruina el propio país”, Sun Tzu.
En marzo deL 2022 escribí un artículo en contra de la reforma planteada en su momento por el gobierno anterior. Hoy revisando el proyecto de ley presentado por el ejecutivo y que cursa su proceso en el congreso, debo admitir que la intención es buena en términos generales, pero en el fondo se mantiene el mismo esquema de exprimir a profesionales y pequeños emprendedores, para no hablar de clases, como lo veremos en el siguiente párrafo. La diferencia entre una y otra es el contenido sugestivo en la expresión: “una contribución tributaria mayor por parte de los ricos, creyendo que los ricos son una minoría”.
Según el DANE quienes tienen ingresos per cápita que superan los 3,52 millones de pesos mensuales, hacen parte de la clase alta colombiana. Las personas clasificadas como pobres son aquellas cuyo ingreso per cápita equivale a 163.445 pesos. La clase media sería todo ciudadano que recibe entre 690.524 y 3.718.204 al mes.
Comparto la teoría de eliminar tantas exenciones que favorecen a los contribuyentes de altos ingresos. Igualmente, las medidas para combatir la evasión y la elusión de impuestos. En principio el recaudo será de 25 billones de pesos, es decir, 1,72% del PIB, hacía el mediano plazo la DIAN, en la lucha contra la evasión, deberá obtener gradualmente recursos totales equivalentes a 50 billones, ósea, el 3,4% del PIB, por año.
Lo que utilizada de la mejor forma contribuiría a disminuir la desigualdad.
El tributo será recaudado de la siguiente manera:
1. Personas naturales: 8.121
2. Renta: 5.428
3. Patrimonio: 2.663
4. Personas jurídicas: 5.110
5. Recursos del uso del subsuelo: 7.022
6. Impuestos saludables y ambientales: 2.549
7. Otras medidas de carácter tributario: 2.198
El peso de la carga tributaria recaerá sobre las personas naturales y en segundo lugar sobre los recursos del uso del subsuelo. Hasta el día de hoy el impuesto de rentas de personas naturales es regresivo beneficiando a los contribuyentes de mayores ingresos.
El proyecto es ambivalente, en la exposición de motivos se habla de tributo a partir de los 10 millones de pesos, pero en el articulado, tácitamente dice: Las pensiones de jubilación estarán gravadas sólo en la parte del pago anual que exceda los 1.790 UVT, es decir; $5.668.930 mensuales. Los congresistas deberán revisar la protección constitucional que tiene la mesada pensional.
El segundo mayor ingreso vendrá del subsuelo, de acuerdo con la Asociación Colombiana de Petróleos, la reforma tributaria subiría al 80% la carga fiscal del sector de petróleo y gas. Colocando en riesgo proyectos no solo de exploración, sino de producción, incluyendo los 180 contratos vigentes.
Por último, me llama la atención que este documento impulse la provisión sostenida de bienes públicos por parte del Estado. Esto significa el ensanchamiento estatal, que no conduce a nada bueno.
Por otro lado, causa preocupación y molestia la no asistencia de Colombia a la sesión de la OEA en donde se condenó al régimen de Nicaragua. No tiene ninguna presentación, ni excusa alguna esta ausencia, sobre todo para condenar un régimen dictatorial, en donde no se respeta los derechos y libertades en general, con una persecución visceral contra la prensa, las ONG, la iglesia católica, entre otros.
El presidente Petro no se ha pronunciado y el embajador ante la OEA, Luis Ernesto Gómez, salió con un trino pueril manifestando, “nos culpan como funcionarios sin que aún lo seamos”.
Como si no hubiera más funcionarios de carrera administrativa en la embajada y en la cancillería. Queda el tufillo de apoyo a esta dictadura, al mejor estilo de Venezuela y Cuba, “entre bomberos no se pisan las mangueras”. Será mera improvisación por el inicio de un gobierno o el cálculo proyectado para consolidarse como un país socialista del siglo XXI.
El texto contó con la aprobación de 27 países de los 34 miembros activos, uno en contra y cuatro abstenciones, (Bolivia, Salvador, Honduras y México). Colombia debe condenar todo tipo de dictaduras, como las de Venezuela, Cuba, Rusia e Irán, pero al parecer esta práctica no la volveremos a ver.
Mientras tanto, después del desplante del presidente Petro a los nuevos comandantes de Fuerza en su transmisión de mando, al cual no asistió a última hora, manifestando un fuerte dolor de estómago, se dirigió a las instalaciones de la IV División del Ejército y allí almorzó en el rancho de tropa con los soldados. Cada día el mandatario encasilla la lucha de clases dentro de la Fuerza Pública.
