La Sociedad X y no es por el cambio de twitter
Por. Coronel Alberto Restrepo Arboleda.
Estamos buscando el muerto río arriba, queremos apegarnos a una falsa esperanza de paz que ha ideologizado las leyes, la seguridad nacional ha relativizado la moral, la ética y ahora como causa justa, nos deja la opción de colocar la X, sobre nuestro futuro, para evitar que el daño sea mayor, al no actuar de forma organizada y monolítica, para que evocando la época del narcoterrorista Pablo Escobar, donde la ciudadanía veía en las ventanas de edificio, locales y centros comerciales, una X formada por cinta pegante, para evitar más heridas o muertes por el efecto de la explosión de carros bomba y otros artefactos; ahora más sofisticados en el gobierno del “cambio”, con detonaciones controladas pero más letales, envueltos en reformas y programas macondianos, que estallan frente a nosotros y aturdiéndonos nos hacen perder capacidad de reacción y no logremos la unión del alma nacional, que muere día a día a causa de esta maldita indiferencia y falta de carácter para no llamar las cosa por su nombre.
Ahora y luego de leer a Lafaurie, quien ante tan evidente acto de traición de sus compañeros de mesa, los elenos y el plan develado por todas las fuentes de inteligencia del país, que evidencian el fondo real de esa tragicomedia habanera; son una clara muestra de la poca seriedad con la que estos narcoterroristas ven este conversatorio y nos reafirman que los bandidos no desfallecen en sus propósitos; al punto de que el bien ponderado baluarte democrático líder inspirador José Félix Lafaurie, solo se remita a un pronunciamiento que a todas luces es politiquero y para nada institucional, pues una de las posibles víctimas, sigue siendo su esposa, María Fernanda Cabal, excepcional y virtuosa opositora que como mujer ha mostrado un liderazgo pocas veces visto en este país, y que decir del Sr. General Eduardo Zapateiro Altamiranda, único general en retiro, que ha tenido el coraje y la gallardía que sin visos de golpista, ha demostrado un liderazgo de honor, que pone en riesgo el populismo demagógico petrista, no siendo menos valerosa la postura del Fiscal General quien ha mostrado firmeza en sus decisiones en circunstancias de un país, donde otros ya se hubieran diluido.
Esperábamos una reacción más enérgica por parte del gobierno, las instituciones y organismos internacionales, pero el directamente afectado José Félix,(negociador), se despachó con un escrito sin contundencia alguna, restándole importancia a un hecho que motivaría a un principiante en métodos de negociación, a congelar las conversaciones hasta tanto hacer claridad, respecto de la realidad de este grupo terrorista, en aspectos de mando, control, planes ordenes, y su política transnacional narcoterrorista. La ingenuidad de los negociadores es tan evidente, que piensan en que el ELN, siguen siendo unos peludos que se pueden transar con salchichón, pan francés y gaseosa colombiana.
