Los diálogos vinculantes en el Eje Cafetero Primera parte

     Por Oscar Alberto Diaz G.

      El día 9 de noviembre en Pereira, en las instalaciones de Expofuturo habló el Eje Cafetero; se llenó el
aforo calculado. Los temas previstos como eje central fueron: ordenamiento territorial, derecho a la
alimentación, a la paz, seguridad humana, convergencia regional y economía sostenible para la vida.
      Por momentos se politizo el evento, lo cual hubiese sido peor si Petro asiste. Menos mal, no vino. De todas
maneras no faltaron los gritos destemplados de los amigos del desorden, a quienes les hace mucha gracia el
accionar de los vándalos dentro de las manifestaciones de los años anteriores. Llegaron a decir que el
gobierno debe agotar recursos para lograr el indulto general de los infractores, pues según un grupo de
jóvenes presentes, el vandalismo terrorista es tan solo un delito político.
      Hubo más quejas que propuestas y en su mayoría, los grupos de trabajo se dedicaron a elaborar una extensa
lista de necesidades sentidas; educación, mejor servicio de salud, total paz y paz total, que no es lo mismo.
Pero que a mi juicio son conceptos utópicos. Máxime cuando se exige la paz desde un estado en el cual no
hay justicia, sin percatarse que sin justicia jamás habrá paz. Ni seguridad.
      Pidieron los jóvenes legalizar el cannabis, los viejos pidieron presupuesto para no vivir solos. Pero no
apareció estructurado ningún proyecto real en esas direcciones. Tal vez el ministerio a cargo de la
organización, el del interior, improvisa de manera imprudente impidiendo que el ciudadano reciba la
orientación adecuada de tal forma que su participación sea más efectiva.
      Vino el ministro del interior, Alfonso Prada, en compañía de la ministra López de Agricultura, quien en
ausencia de Petro fue delegada en funciones presidenciales. Carentes de carisma y realizaciones, fueron
recibidos con indiferencia.
     Y de aplausos tratando, llama la atención que los jóvenes aplauden a todos quienes usen el idioma inclusivo.
Todos todas y todes, suena extraño. A los ministros ya se les pego la idiotez del tal idioma anti RAE.
      En representación de las víctimas intervino un soldado de la reserva, los militares también han sido víctimas;
después de pasar al retiro se graduó como ingeniero mecánico en la UTP, es hombre digno de admiración.
      Pocos aplausos; los jóvenes ignoran la más alta cuota de sacrificio de militares y policías, dentro de esta
guerra sucia contra la soberanía y la democracia.
      No faltó quien pidiera desmilitarizar regiones porque les estorban los servidores de la patria, esos que
garantizan la democracia y una soberanía en la cuerda floja. Soberanía empeñada ya a Cuba y Venezuela.
Poco sirve el ejemplo de Ucrania, hermana menor de Rusia comunista, que si imaginó podría ser víctima de
su hermano mayor.
       Las naciones deberían por conveniencia recordar que entre estados vecinos no hay hermandad ni amigos;
solo intereses económicos. Los venezolanos instigados por Cuba mañana nos invaden y a diferencia de
Ucrania que si tiene con que así sea poco, puede defender su soberanía. (Continua)