Petro vulnera institucionalidad, insta vandalismo y se autovictimiza. Faltan partidos políticos
Estrategia de Petro obedece al manual leninista: generar el mayor caos posible, para salir fortalecido, como mesías victimizado por la derecha, enemigos de la paz y quienes no quieren progreso para los pobres.
Con tales estratagemas consiguió que un despistado noruego, lo proponga para el Premio Nobel de paz, aduciendo ser adalid de la paz total en Colombia, defensor a ultranza de la Amazonía y perseguido por capitalistas por defender la democracia, que según su amañada visión, significa vulnerar la constitución y las leyes e incitar a la violencia callejera, cuando los organismos de control, las cortes o el congreso no den luz verde a sus trapacerías. Para colmo de males, cada vez que se destapa un escándalo derivado de múltiples problemas relacionados con delitos que a cualquier ciudadano, le significan pena privativa de la libertad, habilidoso y tramposo, Petro ingenia otra confrontación, o lanza algún dardo venenoso para cambiar el tercio de la opinión pública y para acumular réditos en su farsa de víctima.
El más reciente invento petrista: Que le van a dar un golpe de Estado, que por haber sido elegido popularmente, él puede violar todas las leyes, que no importa cuantas investigaciones tengan sus cómplices o en cuantos problemas legales esté inmersa la oscura agrupación política que lo cobija, pues cualquier acción que asuman sus jueces naturales o quienes juzgan a sus coequiperos, son desde su óptica, conspiraciones para retirarlo del poder. Petro completó 18 meses en el cargo sin haber gobernado un solo día. Su pasatiempo favorito es viajar haciéndose propaganda al mejor estilo de Juan Manuel Santos y generar conflictos y confrontaciones diarias, al estilo de su juventud cuando era terrorista del M-19.
Sus mensajes son de odio, choques, peleas, desinstitucionalización, incitación a la rebelión de corte comunista y cambio total de estructuras vigentes por modelos de economía marxista. Petro actúa así, porque cuenta con complicidad por inacción de decenas de agrupaciones políticas sin norte, sin programas, sin objetivos y sin estrategias. Ante tal realidad, la única opción para Colombia, es crear un partido político que reúna tales condiciones, ajeno desde luego, a las sempiternas enfermedades demagógicas del país. Manos a la obra, Les habló Luis Alberto Villamarín Pulido #estrategia #geopolítica #luisalbertovillamarinpulido #colombia #petro #partidopolitica #seguridadnacional
