Anales de la revolución. Guerra civil de las soberanías (1859-1862)
Las constantes guerras civiles que afectaron a la actual República de Colombia, sucedidas durante el siglo XIX, estancaron el crecimiento económico y el desarrollo del país,porque enfocaron la vida política de la nación, en los intereses particulares de quienes proveídos de sus privilegios de clase y posición financiera en alianzas con la curia católica o en contra de ella y en asocio con los dueños de los capitales, se autoatribuyeron la conducción nacional y regional de las colectividades políticas.
Sin mayor fortalecimiento ideólogico, pero si con arraigados credos polarizantes, sucedieron múltiples enfrentamientois fratricidas, multiplicadores de odios insepultos, que por la dinámica de sus narrativas se han prolongado hasta el siglo XXI.
En Anales de la Revolución, el radical abogado liberal Felipe Pérez Manosalva, acopia desde la óptica de su colectividad política una serie de documentos y análisis con los que plantea toda la responsabilidad al partido conservador, de la barbarie de la primera época de la sangriente guerra civil de las soberanías (1857-1862), con especial énfasis en el entonces presidente Mariano Ospina Rodríguez.
Naturalmente si se leen y comparan los documentos que escribió el partido conservador respecto a esos sucesos, lo obvio es que la responsabilidad de esa barbarie, recaiga sobre los liberales de tendencia radical, anticlericales y estatistas.
Pero como la Fundación Excelencia, Liderazgo y Transformación pretende es formar pensamiento de estadistas y visión de estrategas, sugiere a los lectores, analizar en detalle este interesante escrito, para tomar de él, todas las enseñanzas que dejaron quienes defendieron uno u otro bando.
Es imprescidnible,que en el futuro, los colombianos tengamos más argumentos y menos pasiones en la toma de decisiones políticas, y para que quienes ejerzan los cargos públicos, apliquen los contenidos del poder en defensa de los intreses nacionales. No los intereses de caudillos en particular.
