Las guerrillas de los Llanos Orientales
Libro escrito por el coronel del Ejército de Colombia Gustavo Sierra Ochoa, con bse en su experiencia personal como comandante del batallón de Infantería Vargas, durante 1951 y 1952, dirigiendo operaciones de combate contra las cuadrillas liberales y comunistas que se estaban enquistando en la región oriental del país.
El comunismo está haciendo una subversión organizada y tiene su antecedente que el movimiento subversivo del nueve de abril de 1948.
La situación de orden público de los Llanos es un movimiento de insurrección contra las autoridades, es una revolución conducida por fuerzas no regulares, un movimiento provocado por fuerzas políticas contra el gobierno legítimo.
La finalidad está bien definida. Busca un cambio del orden político dentro del país. Es el medio adoptado para no comprometerse en una guerra formal. Es una forma de coordinar la cooperación de los enemigos del orden.
La organización de esta subversión es la forma común empleada por el comunismo en muchos países, y en el caso concreto de los Llanos Orientales. Es un hecho cierto, incontrovertible, que en las actuales circunstancias operan agrupaciones de quinta columna, grupos organizados para la resistencia armada y elementos encargados de una intensa propaganda clandestina.
No se han usado exactamente las denominaciones apropiadas para este movimiento.
Hoy no es bandolerismo solamente. Este fue un escalón que ya está sobrepasado según· se desprende de los hechos de armas.
La táctica de guerrillas la está usando en los Llanos Orientales el comunismo en combinación con otros elementos en forma definitiva y afondo en los últimos meses. Viene este movimiento subversivo presentándose en escala ascendente, ha llegado a su mayor plenitud al final del segundo semestre de 1952.
No se han aplicado hasta hoy los medios de reprimir esta subversión, empleando los métodos de la antiguerrilla, como lo aconsejan las circunstancias.
El comunismo por todos los medios busca detener la marcha del gobierno legítimo y cada día realiza más a fondo sus aspiraciones y amplia sus planes de ataque. El plan “A” concebido hace tres años está en permanente desarrollo.
El 9 de abril de 1948 lo perdió el comunismo, según sus propias declaraciones, “porque no había preparado el campesino, porque no lo había corrompido”.
Hoy ha logrado esta aspiración en algunos sectores como en los Llanos Orientales. Se empeña en la continuación de los planes revolucionarios después de haber hecho las modificaciones a las causas que motivaron el fracaso en el primer plan.
El comunismo instruye personal para llevar la subversión a la zona de los campos. Ha empleado cuatro años para preparar esta tarea, para organizar y entrenar personal, para armarlo y distribuirlo de acuerdo con sus fines.
Esta campaña ha sido tenaz y soterrada. El gobierno lo sabe y hay documentos incontrovertibles sobre el particular.
El comunismo espera con estas actividades desde dentro y desde fuera del país por medio de sus agentes secretos y de sus colaboradores.
Hasta hoy ha tenido éxitos ―limitados en algunas ocasiones―en sus reclutamientos, en sus concentraciones, en sus abastecimientos, en su adoctrinamiento y en sus acciones en este sector de los Llanos Orientales. Se ha enganchado personal de otros sitios para este teatro de operaciones.
La subversión en los Llanos Orientales se sintió estimulada por la visita y conferencias de jefes políticos del liberalismo, llevadas a cabo a fines el segundo semestre del año 1951. Se sintió favorecida por el levantamiento del bloqueo de los Llanos.
Gustavo Sierra Ochoa fue un oficial de infantería del Ejército colombiano, que llegó al grado de brigadier general y su último cargo fue el de gobernador del Departamento de Antioquia, cuando falleció en servicio activo en un accidente aéreo ocurrido en 1957, mientras viajaba hacia Villavicencio-Meta.
También fue gobernador del departamento de Caldas, siendo coronel durante el gobierno del general Rojas Pinilla.
El libro “Las guerrillas de los Llanos Orientales” recoge sus experiencias como comandante del batallón de infantería “Batalla del Pantano de Vargas”, durante las operaciones contra las guerrillas liberales de 1951-1952.
